26 de marzo de 2021 - Información general
26 de marzo, Día Mundial del Cáncer de Cérvix
El nuevo protocolo, elaborado por profesionales de la Unidad Multidisciplinaria de Tumores Ginecológicos del Hospital del Mar, apuesta por el seguimiento telemático de la evolución de las pacientes, para evitar visitas innecesarias al hospital en un momento de riesgo de contagio por el SARS-CoV-2. Lo publica el International Journal of Gynecological Cancer. El seguimiento se hace de forma personalizada. En los primeros dos años se alternan visitas presenciales y telemáticas y, a partir de este periodo, se ofrece a las pacientes hacer un seguimiento puramente telemático o bien continuar con esta alternancia. La telemedicina garantiza los mismos resultados que las visitas presenciales. El protocolo, liderado por la Dra. Gemma Mancebo, del Servicio de Obstetricia y Ginecología, es el fruto del trabajo multidisciplinario de un equipo formado por ginecólogos oncológicos, oncólogos, radioterapeutas y patólogos, con un papel destacado de la enfermera gestora de casos.
La Unidad Multidisciplinaria de Tumores Ginecológicos del Hospital del Mar ha creado un protocolo de seguimiento para las pacientes supervivientes de cáncer ginecológico para adaptarlo a la nueva realidad surgida de la pandemia de la COVID-19. Una nueva forma de actuar destinada a proteger a las enfermas y evitar visites al hospital ante el riesgo de contagio por el coronavirus SARS-CoV-2. Los pacientes con cáncer son considerados un grupo de riesgo y pueden resultar más afectados por la infección. El documento, lo ha publicado el International Journal of Gynecological Cancer, es fruto del trabajo multidisciplinario de los servicios de Obstetricia y Ginecología, de Oncología Médica, de Oncología Radioterápica y de Anatomía Patológica, y ha contado como a figura central, con el papel de la enfermera gestora de casos.
Miembros del equipo de la Unidad Multidisciplinaria de Tumores Ginecológicos
El nuevo protocolo adapta las recomendaciones de las principales guías clínicas de ajustar el seguimiento de las pacientes con cáncer de ovario, endometrio o cérvix a las particularidades de cada caso, teniendo en cuenta la realidad derivada de la actual pandemia. Para hacerlo, se han tenido en cuenta los patrones de supervivencia y recurrencia en cada patología para proponer una estrategia de seguimiento basada en la telemedicina que garantice los mismos resultados que el modelo actual. El resultado es un esquema basado en la combinación de visitas presenciales y medicina a distancia, y la estratificación de las pacientes en función del riesgo de recaída, con el apoyo de la evidencia científica existente y un modelo de decisiones compartidas entre los profesionales sanitarios y las pacientes.
La Dra. Gemma Mancebo, autora principal del artículo y responsable de la Unidad Funcional Multidisciplinaria de Tumores Ginecológicos del Hospital del Mar, asegura que el protocolo apuesta por "implementar la telemedicina en nuestra práctica clínica. Se trata de normalizar una situación que se ha producido durante la COVID-19". Apunta que "el trabajo ha surgido de la necesidad de aplicar la telemedicina a la práctica clínica durante la situación de riesgo de infección por COVID-19 y de implementar las recomendaciones de las guías de práctica clínica ya existentes, con una racionalización de las visitas y la utilización de pruebas complementarias". De hecho, explica que "se trata de prepararnos para una situación que ha venido para quedarse". El protocolo es un documento único para cada paciente, ya que pone en el centro no solo los riesgos individualizados de recaída para cada una de ellas, sino que también tiene en cuenta sus preferencias. El protocolo ya se está aplicando en el día a día de la Unidad.
El objetivo del seguimiento de las pacientes con cáncer ginecológico es la detección precoz de posibles recaídas. Esta detección no mejora con un número más alto de visitas al hospital, que pueden provocar una falsa sensación de seguridad. Por este motivo, el nuevo protocolo pone el acento en la educación de las pacientes sobre los signos clínicos de recidiva. La Dra. Ester Miralpeix, última autora del artículo y médica adjunta del Servicio de Obstetricia y Ginecología, asegura que "hay que cambiar la mentalidad que hay que hacer la visita en el hospital porque toca, hay que romper este marco mental del 'más es mejor'".
El documento se basa en un programa de decisión compartida basado en la telemedicina, a medida de cada paciente y en el cual, los profesionales sanitarios y la enferma acuerdan el funcionamiento. En el caso que la paciente lo prefiera, se opta por mantener el seguimiento presencial. El modelo se ha diseñado en función del riesgo de recaída, que es más elevado en los dos primeros años posteriores al finalizar el tratamiento. En este periodo, se prevé un seguimiento alternando visitas presenciales y telemáticas cada 3-6 meses, en función del tipo de patología y estadio. Entre el tercer y quinto año, cuando se reduce el riesgo de recurrencia del cáncer, se ofrece un seguimiento cada 6-12 meses presencial o vía telemedicina. En este caso, hay dos opciones, una vídeollamada cada seis meses completada con una exploración física una vez al año, y un seguimiento abierto, a requerimiento de la paciente en caso de detectar un síntoma de recaída, que irá acompañado de una visita presencial en un plazo inferior a una semana.
En todo este proceso, el papel de la enfermera gestora de casos es central. Una vez la paciente acaba su tratamiento es la hora de formarla sobre los beneficios y ventajas de las dos opciones ofrecidas en lo que respecta a la detección de recaídas, resultados oncológicos, expectativas y accesibilidad al sistema de salud. En función de su decisión se diseña un seguimiento a medida, con implicación de todos los miembros del equipo de la Unidad Funcional Multidisciplinaria de Tumores Ginecológicos.
El Dr. Joan Albanell, jefe del Servicio de Oncología Médica, destaca que "se trata de un planteamiento innovador, que acerca el hospital a casa de la paciente, con un protocolo de visitas que garantiza el seguimiento adecuado de la enfermedad, como si fuese al hospital". Por su parte, el Dr. Antoni Payà, jefe del Servicio de Obstetricia y Ginecología, apunta que el nuevo modelo de seguimiento refleja los cambios en la visión del trato con el paciente. "Desde hace tiempo, está demostrado que el tratamiento del cáncer ginecológico es, y tiene que ser, multidisciplinario. De esta manera se logran los mejores resultados. Dentro de esta multidisciplinariedad, tenemos que incluir al paciente y a sus circunstancias, haciéndolo participar activamente del tratamiento y del control de su proceso, no dejando que solo sea el sujeto pasivo donde recaen las acciones terapéuticas y el control de la enfermedad", asegura.
Mancebo G, Solé-Sedeño J, Membrive I, et al Gynecologic cancer surveillance in the era of SARS-CoV-2 (COVID-19) International Journal of Gynecologic Cancer Published Online First: 05 October 2020. doi: 10.1136/ijgc-2020-001942
Parc Salut Mar
Passeig Marítim 25-29 Barcelona 08003
Ver la situación en Google Maps
Tel: 93 248 30 00 · Fax: 93 248 32 54
Solicitud de información
© 2006 - 2024 Hospital del Mar · Avíso Legal y Privacidad de datos | Política de Cookies | Accesibilidad